Cuando utilizamos una luz estroboscópica para inspeccionar un objeto en movimiento, obtenemos el mismo efecto en nuestro ojo que el flash en la película de nuestra cámara. Cada ráfaga de luz estroboscópica produce una imagen clara y nítida para que pueda ver detalles finos del objeto o de la superficie que estamos inspeccionando sin desenfoque a alta velocidad.