Herrekor - Empresa de Ingeniería y Soluciones Industriales con marcas líderes en Transmisión de Potencia, Converting y Electrónica Industrial, trabaja desde 2015 con Unilux ofreciendo luces estroboscópicas de inspección de superficie que ayudan a maximizar el rendimiento de los procesos de valor añadido y permiten a los usuarios ver defectos de superficie en tiempo real, a plena velocidad de producción y al ancho completo del producto. Los usuarios pueden utilizar su conocimiento de los productos manufacturados y los procesos para determinar la gravedad de un problema y tomar decisiones para minimizar el impacto económico.
Las luces de Unilux se utilizan principalmente en las acerías, fábricas de papel e imprentas y plantas de conversión de todo el mundo. La amplia oferta de productos, el desarrollo continuado de productos y el servicio al cliente incomparable aseguran que cumplimos con las crecientes necesidades de nuestros clientes y sus diversas aplicaciones.
Un estrobo es una luz que destella rápidamente. Es un instrumento que se utiliza para ver y ajustar objetos que vibran o que están en movimiento al iluminarnos con una luz pulsante que los hace aparecer estacionarios. El estroboscopio fue inventado por Joseph Antoine Ferdinand Plateau, profesor en Ghent -Bélgica- en 1836.
En 1931, el Dr. Harold Eugene Edgerton, profesor en el MIT, desarrolló la lámpara Xenón. Este desarrollo expandió las aplicaciones de la luz estroboscópica al uso fotográfico y también abrió su utilización en muchas aplicaciones comerciales e industriales.
Una lámpara estroboscópica produce un destello corto e intenso de luz, de 1/100,000 segundos de duración. Los flashes de alta intensidad y extremadamente cortos “congelan” la imagen del objeto en la retina del ojo proporcionando una imagen clara, sin movimiento, del objeto. Si el objeto continúa moviéndose se ve como una serie de imágenes quietas tal como veríamos una pelota en movimiento o una persona bailando bajo la luz estroboscópica de una discoteca.
La experiencia ampliamente conocida por las personas es la de la luz estroboscópica vista en discotecas o también lámparas para comprobar motores. Muchas de estas utilidades trabajan a ratios de destello bajos, donde se puede percibir fácilmente la interrupción entre cada flash. Estas aplicaciones estroboscópicas generalmente operan a 10-30 flashes por segundo y crea lo que se conoce como efecto parpadeo.
Cuando una lámpara estroboscópica se utiliza a velocidades por encima de 60 flashes por segundo, el destello es tan frecuente que el ojo humano no puede detectar la secuencia de intermitencia. De esta manera, el parpadeo deja de ser molesto para las personas en la zona. La luz estroboscópica que opera por encima de 60 flashes por segundo no se diferencia de la iluminación fluorescente o incandescente excepto que ilumina con claridad cualquier objeto en movimiento proporcionando al ojo una imagen definida que podemos enfocar.
¿Qué hace una lámpara estroboscópica?
Cuando un objeto se mueve rápidamente el ojo no tiene tiempo de enfocar en él. Dependiendo de la velocidad del objeto en relación con la distancia de enfoque, el objeto aparece borroso. Un ejemplo son las aspas de un ventilador que aparecen como una superficie semitransparente mientras giran. El ojo intenta enfocar en las aspas, pero al seguir girando aparece como una imagen desenfocada. Esto se conoce como ‘desenfoque de movimiento’. El desenfoque de movimiento hace que sea imposible ver con claridad un objeto que se mueve por encima de 100 metros/minuto y producen gran estrés al ojo para movimientos entre 50 m/min y 100 m/min.
Intentar enfocar un objeto que se mueve rápido nos muestra las limitaciones del ojo humano. El ojo reacciona de forma parecida a la manera que reaccionan las sustancias químicas en una película de fotografía. Cuando las sustancias se exponen a la luz, se activan para producir una imagen en la película. Si el objeto que se fotografía se mueve rápidamente, la imagen es borrosa. Para corregir este problema, el fotógrafo incrementa la velocidad de obturación de la cámara. A mayor velocidad de obturación, se reduce el tiempo de entrada de luz que activa las sustancias químicas de la película. Al ser menor el tiempo de exposición, hay menor movimiento del objeto en la película y por tanto la imagen es menos borrosa. Esto proporciona una imagen de mayor claridad. Obviamente, a nivel del ojo humano no podemos incrementar la velocidad con la que vemos una imagen por lo que buscamos una forma de conseguir el efecto del disparador de la cámara fotográfica.
El flash de una lámpara estroboscópica actúa para congelar el movimiento al igual que lo hace el obturador de una cámara. El destello con una duración de 10-30 microsegundos genera una respuesta de congelación del movimiento a nivel de la retina. Un objeto moviéndose a 600 m/min sólo se desplaza 0,1mm durante este tiempo, una distancia tan mínima que al ojo le aparece como estacionario. Se elimina el desenfoque por movimiento y se mejora el contraste y la definición. Cuando se incrementa la frecuencia de flashes se crea una sucesión de imágenes que se mueven delante del campo de visión, estimulando la detección e identificación de defectos.
Sincronización de la lámpara estroboscópica
Controlando cuando tiene lugar el destello de un estrobo, o el tiempo entre destellos (frecuencia de flashes), un objeto en movimiento o en rotación puede aparecer: 1) parado; 2) se adelanta poco a poco; 3) se retrasa poco a poco.
En el caso de las aspas del ventilador mencionado antes, si el estrobo se sincroniza para destellar cada vez que un aspa está exactamente en la misma posición, el aspa aparecerá perfectamente quieto. Esto es porque cada destello congela exactamente la misma imagen en la retina. Ya que la retina no ve movimiento en las aspas, el ojo no percibe movimiento.
Si el estrobo está sincronizado para que el destello sea ligeramente más rápido que la velocidad de giro del ventilador, el aspa no habrá alcanzado la posición previa en el momento del siguiente destello del estrobo. Este patrón se repite creando una serie de imágenes en la retina, provocando la sensación de adelantarse el aspa poco a poco.
Si por el contrario el estrobo está sincronizado para que el destello sea ligeramente más lento que la velocidad de giro del ventilador, el aspa habrá sobrepasado la posición previa en el momento del siguiente destello del estrobo. Este patrón se repite creando una serie de imágenes en la retina, provocando la sensación de retrasarse el aspa poco a poco.
Fuente: UNILUX